¿Por qué los tours de viaje caen en desuso y por qué tendrías que tener un seguro de viaje internacional?

Para muchos, viajar en grupos puede ser una ventaja, mientras que para otros es una real pesadilla. Los tours de viaje comienzan a dar sus primeros indicios de que ya no son el plan perfecto para las vacaciones.

¿Todo organizado? ¿Todo pago y de una vez? ¿Todos los detalles, incluidos la asistencia al viajero, están pensados? ¿Un coordinador te llevará a recorrer el destino, almorzar y disfrutar sin que tengas que detenerte a planificar nada? Pues, a quién le viene en gracia gastar el dinero del descanso merecido en vacaciones planeadas por otros que ni siquiera nos conoce. Según cuentan los turistas, el tour de viaje -tal y como todos lo conocemos- ya dejó de ser una solución.

Por tiempo, los tours han sido una gran opción para aquellos que visitan un país por primera vez. Es que, considerando todos los factores que hay que tener en cuenta: Definir una ruta de viaje, coordinar los horarios de check in y check out con el cronograma de trenes y aviones, consultar dónde y a través de qué medio de pago se pueden obtener los boletos, ¡Uf!, son tareas que requieren de tiempo y paciencia, además de cierto conocimiento del destino y del idioma, si fuera necesario.

Contratá un tour y despreocupate, o no

La agencia se encarga de contratar todo lo necesario para que disfrutes tu estadía, dice el slogan. Sin embargo, proliferan los mensajes negativos por los que cada vez más turistas tienen que echar mano en sus seguros de viaje para reclamar la devolución del dinero, de las pertenencias robadas porque cayeron en un hotel de mala gracia, o por intoxicación con alimentos en mal estado.

¿Cómo nos aseguramos que esos tours no sean una pesadilla? Pues ya lo dice el refrán: si no lo ves, nunca lo sabrás. En base a las malas experiencias de los turistas, el sitio Vueltaalmundo.com destacó las principales razones por las que hay que evitar esos ya cada vez menos recomendados tours:

Grupos

Ir a un tour implica compartir el viaje con un grupo de personas que no conocés.  Esto para algunos puede ser un poco incómodo, sobre todo cuando las agencias no anticipan cuántos serán los participarán de la salida.

Primero que nada, hay que saber que no estás obligado a compartir alojamiento con nadie, esto se conversa previamente. Generalmente las habitaciones compartidas son para quienes viajan solos y buscan abaratar costos.

Los momentos para movilizarse en grupo serán principalmente las excursiones y durante el desayuno en el hotel.

Muchas empresas previo al tour, organizan encuentros en bares para que aquellos que van a viajar juntos puedan conocerse y conversar previamente. En ocasiones son grupos grandes, compuestos por 30 o 40 personas y, naturalmente, se terminan conformando sub-grupos organizados por edades.

Federico se negaba a compartir tiempo y espacio con desconocidos. Tiene casi 40 años y es soltero. Todos sus amigos tienen hijos y vacacionan en familia. Por lo tanto el tenía dos opciones: viajar solo (por su cuenta) o contratar un tour.

La experiencia lo sorprendió cuando la primera noche después de una fiesta en la que participó todo el grupo, tuvo que esperar a que el último quiera irse para que el transporte los lleve a todos juntos. Oh sí, vienen juntos y se van juntos.

Tiempo libre

Muchos creen que contratar un tour les quita la posibilidad de tener tiempo libre y la libertad de elegir dónde ir. Al contrario, al conocer por anticipado los horarios de las excursiones y visitas podés elegir y planear qué hacer antes o después.

El problema es que no todos se toman esta molestia, y en ocasiones, las agencias no advierten cuáles serán los ratos libres pues así toman por sorpresa a los turistas, y esto se convierte en una gran oportunidad para abultar el tours con más y costosas actividades.

Con el tour vas a conocer los lugares más importantes y característicos de la ciudad, lo que suelen llamar: los imperdibles. Después por tu cuenta podés investigar y visitar otros sitios que quizá no sean tan populares.

Los tiempos muertos pueden convertirse en momentos aprovechables para los que van en búsqueda de relax, sin embargo, para los que quieren acción, puede resultar un verdadero bodrio.

Gastronomía

Suelen decir que lo mejor de los tours son las delicias autóctonas que se prueban en los desayunos, almuerzos o cenas. Pues no, asegurate de que el tour lo contemple porque muchas veces te enterás que vas a un gran restaurante con todo el grupo, pero sólo podés degustar uno o dos platos a valor promocional.

Peor aún, el restaurante de pastas caseras sólo tiene milanesas con papas fritas y alguna nube flotante de finas hierbas, pero nada de pastas. ¡Malísimo! La comida de cada país debe estar dentro del tour, sino el que contrataste, el que harás por tu cuenta cuando termine esta tortura.

Seguro médico

Además de los grupos, los paseos y la gastronomía hay un factor más que debés considerar: el seguro médico.

Los tours muchas veces te proponen sumar un seguro de viaje como parte del paquete. ¡Poné los fideos que estamos todos! Consultá con exactitud los montos y cláusulas ya que por lo general es una cobertura básica, y en algunos casos anula o complementa lo que tengas contratado por tu cuenta.

Cuando comprás los pasajes de avión a través de alguna agencia de viajes también te ofrecer agregar un seguro de viaje. Si lo hacés vía internet es algo arriesgado ya que no tenés la posibilidad de leer la letra chica y realmente no sabés bien qué estás pagando.

Es preferible contratar un seguro de viaje con una empresa especializada que pueda ofrecerte un servicio personalizado.

Dicho esto, viajar en grupo puede ser tu peor pesadilla, por eso te afirmamos, y super afirmamos, que tengas un plan B, y siempre un seguro de viaje internacional a mano, porque si querés reclamar algo y que te escuchen, nada mejor que tu agente de viajes esté del otro lado del teléfono.