Llegan las vacaciones de invierno, no te olvides del abrigo y la cobertura médica para niños

Decidiste tomarte unos días en familia y cediste finalmente al reclamo de tus hijos de conocer la nieve. Pasajes comprados, hoteles reservados, ¡lo importante está listo! En este momento estás planificando qué vas a llevar en la valija y meditando acerca del seguro de salud para tus niños. ¿Te sentiste identificada/o? ¡Este artículo es especial para vos!

Tomá nota de estas recomendaciones imprescindibles para viajar prevenido y disfrutar sin interrupciones.

¿Cómo abrigar a los niños?

1- Ropa en capas

Seguramente no querrás echar mano en tu cobertura médica para niños el primer día de las vacaciones. Aunque abrigarlos bien sea una posible solución, el tema es cómo hacerlo.

Muchas veces al hacer actividad física los niños transpiran, si llevan puesta una campera muy gruesa sienten mucho calor y quieren sacarla. El problema es que frente a la temperatura ambiente con una remera que llevan debajo quedan muy expuestos. Por esto lo ideal es vestirlos en “capas”.

Más allá de la actividad física que puedan realizar, en determinadas localidades existe lo que denominan amplitud térmica: a la mañana temprano es probable que el frío sea más intenso pero aminora al mediodía, en ese momento la temperatura puede subir hasta 10 o 15 grados más y luego vuelve a descender al atardecer.

Lo ideal es que la primer prenda sea de algodón, arriba de eso pueden usar una camiseta térmica, seguido de un saco de lana o buzo polar. Lo bueno del algodón es que si el niño transpira, esta tela absorbe y seca más rápidamente que por ejemplo la lycra.

Por último la campera en lo posible impermeable. También es práctico cuando el buzo o saco tienen cierre ya que a veces con tan sólo llevarlo abierto calma la sensación de calor y no es necesario sacar la prenda completamente. Además recomendamos que lleven dos pares de medias que no sean de fibra (idealmente un par de algodón y encima unos de lana) y de esta manera evitaremos la transpiración y por lo tanto la humedad.

2 – Cambiarse al llegar a casa

Es probable que debido a una caminata intensa o bien por la calefacción del vehículo que los transporte hasta el sitio donde estén alojados los niños al llegar a destino estén transpirados. Si la ropa permanece húmeda en el cuerpo eso provoca que baje la temperatura corporal y puede provocar un resfrío. Por lo tanto es importante cambiarse al llegar a casa y ponerse ropa seca.

3 – Usar gorro o bufanda.

El aire frío al entrar por las vías respiratorias, produce una vasoconstricción, las secreciones no fluyen con facilidad y se dificulta la circulación de la sangre. Por lo tanto es bueno cubrirles a los niños la nariz y la boca y que la bufanda o el pasamontañas funcione como filtro. Los niños pierden mucha temperatura por el cuero cabelludo, por eso también es necesario usar gorro.

Posibles problemas derivados del contacto con el frío

Como mencionamos anteriormente, la transpiración provoca que la ropa se humedezca y si ésta permanece varias horas sobre la piel del niño no sólo disminuye la temperatura corporal y podría eventualmente enfermarse sino que esa humedad también puede producir hongos, especialmente en los pies.

El doctor Paris advierte que si se trata de bebés o niños pequeños hay que abrigarlos más aún ya que al tener menos grasa corporal van a sentir más el frío. Cuando un cuerpo se enfría bajan sus defensas.

La garganta como ya dijimos, es uno de los lugares del cuerpo más expuestos, por la boca es el lugar donde pueden ingresar todos los virus y bacterias. La tos, dolor de garganta o oídos son los síntomas frecuentes que pueden derivar en enfermedades como faringitis,  angina u otitis, muchas veces acompañadas de fiebre.

¿Qué hacer para prevenir?

Una de las mejores medidas de prevención es contar un seguro para viajeros. En especial si vas a viajar fuera de tu país de origen.

Cuando estamos de vacaciones es muy común concurrir a lugares como shoppings o centros comerciales donde la calefacción es muy alta y están repletos de personas y esto puede favorecer el contagio. Por lo tanto además del abrigo es importante lavarse las manos frecuentemente.

Seguros de viaje internacional hay muchos, varían las prestaciones y los valores de acuerdo a distintos factores, uno de ellos es la edad, aunque seguramente te convenga contratar un paquete familiar.

Si lo que te gusta es la nieve, una encuesta realizada en 2018 reveló que el mejor lugar para visitar es Francia. Uno de los paisajes más hermosos lo encontrás en Chamonix,  localizado a 1.050 metros de altitud, desde allí se puede observar la montaña más alta de Europa Occidental: el Mont-Blanc. Por otro lado cuenta con una de las pistas de esquí más grandes del mundo: Les 3 Vallées que cuenta con una extensión de 600 km.

Chile, por ejemplo, es uno de los destinos más populares a nivel mundial en la época invernal. Millones de personas lo eligen cada año, en especial los amantes del esquí o Snowboard. Si bien puede ser una experiencia increíble y súper divertida, existe cierto riesgo en practicar estos deportes, por lo tanto es importante contar con un seguro de viaje en Chile en el caso de que necesites atención médica. Incluso si no te atreves al esquí ni al Snowboard y sólo planeás hacer “culipatín” junto a tus hijos y acompañarlos a la pista de patinaje, ya vimos los problemas que puede ocasionar cuando permanecemos al aire libre mojados y a veces esto es inevitable, en especial si está nevando.

Además de Chile otro lugar muy popular es Bariloche que cuenta con una enorme oferta de deportes invernales y varios cerros y centros de esquí. Si bien en esta localidad podés encontrar hospitales públicos, no es una buena idea llevar a tus hijos a una guardia atestada de gente enferma y tener que esperar largas horas que te atiendan. Lo mejor es contratar previamente un seguro médico de viaje que incluya la visita médica a domicilio.

¿Ya terminaste de armar la valija? ¡ahora a disfrutar!