El lunes 19 de agosto será día no laborable finalmente, según lo estableció el Gobierno nacional: con fines turísticos. El 17 de agosto es el feriado oficial, día en que se conmemora el Paso a la Inmortalidad del General José de San Martín.
A los fines de impulsar el turismo interno, se prolongó hasta el primer día de la semana, pero no es obligatorio para todos los sectores. En el ámbito público (administración pública nacional, provincial y municipal) declaró asueto el lunes, mientras que en el privado la decisión depende de cada empleador. Los que trabajen en el rubro bancario y de seguros tendrán el día libre.
Para los que tengan la suerte de poder disfrutar el fin de semana largo, tomen nota de estos tips para aprovechar cada minuto.
¿Ya estás preparando los bolsos? Esperá, antes te voy a dar una buena recomendación: no te alejes de tu hogar sin un seguro de viaje. Es lo primero que tenés que definir después de haber elegido tu destino.
Estar prevenido ante cualquier eventualidad será más que útil. Si no contrataste un seguro de viaje a tiempo y te toca una gripe o un accidente imprevisto, no te quedará más opción que buscar en qué lugar atenderte y al precio que sea.
Existen varias opciones. Antes de pedir presupuestos tenés que definir las fechas en las que vas a viajar y los lugares que vas a visitar.
Contar con una cobertura médica de viaje implica la tranquilidad de tener un número para comunicarte donde sabés que te van a responder de manera rápida y eficiente. No sólo para una emergencia médica sino que también otro va a ocuparse de resolver algún eventual problema con tu equipaje o documentación.
La organización previa es clave. A los amantes de la espontaneidad, que quieren dejarse ir hacia donde los lleve el viento, les decimos que puede ser muy emocionante pero teniendo solamente tres días hay que racionalizar el tiempo y el dinero.
Probablemente quieras hacer muchísimas cosas pero de esa primera lista vas a tener que establecer prioridades y resignar algunas actividades o destinos.
Señalá como punto de partida en el mapa tu lugar de residencia y observá las localidades más cercanas. Te vas a sorprender cuando te enteres de la existencia de lugares que nunca habías escuchado nombrar. Descubrí la magia de los pueblos pequeños.
Si contás con pocos días lo mejor es elegir destinos cercanos a los que puedas llegar por vía terrestre, ya sea en auto o micro. No tiene sentido perder horas esperando en el aeropuerto o arriba de un avión dónde ni siquiera podés apreciar el paisaje. Te recomendamos descargar los mapas sin conexión en tu teléfono celular si vas a ir manejando ya que en algunas zonas puede no haber señal.
¡Llevá siempre provisiones! con esto nos referimos a que tengas a mano un pendrive o CDs con música, agua mineral, algo para comer y un botiquín con elementos de primeros auxilios. A pesar de que hayas contratado un seguro de salud, podés sufrir accidentes cotidianos como quemarte o cortarte, teniendo gasas, alcohol, algodón y cinta adhesiva podés curar la herida en el momento y según cómo evolucione decidir si requerir o no la cobertura médica.
Hablando de provisiones, recordemos que viajás por tres días, llevá valijas livianas ¡no cargues un equipaje excesivamente grande! Incluso puede alcanzar con una mochila. Eso sí, siempre dos pares de zapatillas, una de repuesto es fundamental por si se mojan o ensucian demasiado. Consultá donde vayas a alojarte si cuentan con el servicio de ropa de cama y baño, esto va a ahorrarte el peso que cargarías llevando toallas y sábanas.
Por otro lado, dependiendo de los horarios de check in y check out, quizá tengas que recorrer algunas horas con el equipaje a cuestas antes de poder dejarlo en el hotel. O al revés, retirarte del lugar donde te estés alojando pero quedarte unas horas más para disfrutar del lugar hasta que caiga el sol.
Conocé la gastronomía local. No sabés cuándo vas a volver, por lo tanto cuando vayas al restaurante pedile al mozo que te recomiende la especialidad de la casa y elegí ese menú. Para desayunar o merendar optá por los negocios pequeños o ferias en lugar de las grandes cadenas, en ellas podés consumir cualquier otro día del año. Además de probar los productos autóctonos contribuís a la economía local.
No te excedas comprando recuerdos o souvenirs. Te sorprendería al final de un viaje el porcentaje total del presupuesto que destinaste a comprar regalos para los demás (¡o incluso para vos!). Por otro lado si el espacio en el medio de transporte es limitado todos los que viajen junto a vos van a sentirse incómodos. No los obligues a sentarse rodeados de una gran cantidad de artículos que en ocasiones son de gran tamaño y frágiles.
¡Los mejores recuerdos son las fotos!
Por último te recomendamos llevar un cargador portátil ya que es importante si necesitás por alguna emergencia comunicarte ya sea con el seguro médico por un problema de salud o con el seguro automotor por un inconveniente técnico tengas batería en el celular.